Uno de los colaboradores más leales de Trump estará a cargo del manejo del personal que trabaja en la Casa Blanca.
El presidente Donald Trump nombrará a Dan Scavino, actual subjefe de gabinete de la Casa Blanca, como nuevo jefe de la Oficina de Personal Presidencial. Este trabajo es uno de los roles más influyentes dentro del gobierno, ya que se encarga de decidir quién puede y quién no puede formar parte de la administración Trump.
La información fue confirmada por el medio Axios esta mañana. Scavino sucede en el puesto a Sergio Gor, a quien Trump nominó ayer lunes para que ocupe el cargo de Embajador en la India y enviado especial para Asuntos del Sur y Centro de Asia.
«Dan Scavino es uno de los asesores más confiables y con más trayectoria del presidente Trump,» aseguró la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt. «No hay nadie mejor para asegurarse de que la administración esté compuesta por los trabajadores más calificados, competentes y comprometidos con la agenda America First,» recalcó.
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El asesor más leal de Trump.
El líder republicano considera a Scavino como uno de sus asesores más confiables. El funcionario también se destaca por su veteranía en el mundo trumpista, pues comenzó a trabajar en la órbita del actual presidente a principios de la década de 2000 dirigiendo uno de sus clubes de golf.
Cuando Trump lanzó su aventura presidencial, Scavino fue nombrado como director de redes sociales durante la primera campaña de 2016, cargo que también ocupó durante la primera presidencia del republicano. Entre otras funciones, Scavino gestionaba la cuenta de Trump en la red social Twitter.
Fue además uno de los pocos asesores que permaneció al lado de Trump después de que dejó la presidencia en 2021 y que haya sido perseguido judicialmente por los demócratas durante el gobierno de Biden, volviendo a trabajar en la campaña presidencial republicana de 2024.
Se espera que Scavino lleve esa lealtad que lo hizo ascender en los círculos trumpistas al máximo nivel. El flamante nuevo director de personal de la Casa Blanca es conocido por haber adoptado una política de tolerancia cero hacia aspirantes a cargos, revisando detalladamente sus publicaciones en redes sociales e incluso interviniendo en sus contrataciones.