El último informe sobre antisemistismo elaborado por la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentina (la DAIA) arroja un dato alarmante. Este creció un 15 % respecto a 2023, con un 61% de las expresiones de odios hacia la colectividad judía concentradas en las redes sociales. X lidera el podio.
La totalidad del informe, que tiene 80 páginas, estará disponible en unos días, pero el adelanto del mismo ya arroja un mapa de situación. Sobre todo en cómo influyó en este cambio el impacto local del barbárico ataque del grupo fundamentalista palestino Hamas del 7 de octubre de 2023, y cómo se interpreta también la cruzada de Benjamín Netanyahu sobre la Franja de Gaza.
El 7/10/23, terroristas de Hamas entraron al territorio israelí varios kilómetros adentro. Arrasaron comunidades, mataron a 1.200 personas a sangre fría, civiles y militares. A personas de todas las edades. Los quemaron adentro de sus casas, mataron a sus mascotas. Violaron mujeres y se llevaron 250 personas como rehenes. Desde entonces, Israel libra una guerra y un bloqueo en Gaza, que está ocupada por la fuerza hebrea, que arroja más de 50.000 muertos según convalidan organismos internacionales de las fuentes palestinas.
El resultado a nivel internacional, es una causa por crímenes de guerra contra Netanyahu y una ola de protestas de gobiernos y estudiantes que son anti israelíes, pero que van tomado un fuerte tono antisemita. En Estados Unidos, para el caso, ya hubo tres ataques a personas judías vinculadas a crímenes de odio.
En Argentina aunque en menor medida, el tono en las redes se volvió virulento. “Yo creo, básicamente que es preocupante porque sí hay un gran crecimiento del antisemitismo, esto para mí es consecuencia del 7 de octubre, y por otro lado hay un tema que nos preocupa mucho que tiene que ver con que hay grupos minoritarios como puede ser el LGTB. Pueden ser los grupos feministas, los de centro izquierda, donde ellos, para realizar alianzas estratégicas o alianzas de minorías, terminan levantando banderas para identificarse con potenciar un mensaje que no terminan de tener claro,” dijo a Clarín el nuevo presidente de la DAIA, Mauro Berenstein, quien cree que estos grupos principalmente grupos que “buscan apoyo sin entender que es Hamas”.
Berenstein, que en las próximas horas está viajando por su lado para coincidir con el segundo viaje del presidente Javier Milei a Jerusalén -del 10 al 12 de junio- pidió recordar que Hamas es es un grupo terrorista cuya carta fundamental pide la destrucción del Estado de Israel y la muerte de los judíos. «Me parece que estos grupos que apoyan y levantan las banderas palestinas buscan una identificación por una cuestión de que su voz se alce pero que a su vez tiene que ver con que no entienden realmente cuál es la situación de Medio Oriente, no entienden qué están representando a un grupo terrorista, que tiene un culto a la muerte y que es un grupo que todo el fondeo que se ha dado para ayuda comunitaria se ha terminado destinando a realizar la masacre y el ataque terrorista del 7 de octubre.”
Las estadísticas
Para la DAIA, este cóctel es lo que termina generando antisemitismo también en Argentina. Según el Centro de Estudios Sociales (CES) de la institución que nuclea a todas las instituciones judías del país, en 2024 se registraron 678 denuncias. Son 80 más que el año anterior. Y es lo que arroja el crecimiento de 15% comparado con 2023.
En diciembre se registró la mayor cantidad de denuncias: 141. Eso es más del doble que el mes anterior y casi 50% más que el segundo mes con más denuncias (enero). “El crecimiento de denuncias vinculadas con el antisemitismo durante diciembre fue de la mano con un hecho concreto: El canal de streaming Olga hizo un sketch, que pretendió ser humorístico, representando un pesebre viviente.”, sostiene el informe, cuyo contenido -es decir los mensajes contenidos en los ataques y expresiones antisemitas- se conocerán cuando se publiquen sus 80 páginas.
Este manifiesta preocupación por el efecto de las redes sociales como amplificador de mensajes de odio a través de estereotipos y teorías antijudías
El podio de las denuncias recibidas por el CES se mantuvo sin modificaciones: sobre Medio Oriente (40%), con simbología nazi (23%) y conspirativo (14%)
DAIA mira con mucha atención las cifras relacionadas con los hechos registrados en los barrios y en los colegios. Dice que los actos de antisemitismo registrados en redes sociales ocupan especial interés en el contexto anteriormente desarrollado. Las redes sociales más utilizadas con este propósito fueron: X (42%), Facebook (22%), Instagram (16%), YouTube (14%) y Tik Tok (4%).
En 2024 creció también el número de denuncias por hechos de antisemitismo que incluyeron agresiones físicas. En total fueron 10 denuncias. La cifra triplicó a las 3 que se habían registrado en 2023. El crecimiento es alarmante si se lo compara con el informe de 2022 donde se había registrado solo 1.
Consultado Berenstein si no creía también que la ocupación por parte de las fuerzas israelíes de la Franja de Gaza y las imágenes del sufrimiento de los gazatíes se mezclaba las criticas a Israel con antisemeitismo, afirmó:
“Yo creo que es una conjunción de cosas. Por un lado, el 7 de octubre generó como un caldo de cultivo para que muchas personas se salgan a expresar, que no hay entendimiento de la situación geopolítica de qué es lo que está defendiendo el Estado de Israel y que hay grupos minoritarios que utilizan para amplificar su voz, aliarse con otros grupos, como puede ser el Hamas, donde no entienden cuál es el mensaje y cuáles son los valores». Cree que esos grupos no son conscientes lo que están representando.
Berenstein sostuvo también que hay “una generalización de generación de antisemitismo por una crítica a la política que está tomando el Estado de Israel, pero esa es la interpretación y la definición de cada persona. Sí creo que el 7 de octubre despertó esto, pero yo quiero creer que la comunidad argentina no es una comunidad antisemita, sino que es una comunidad, cuando comunidad estoy hablando de la sociedad en general», señaló y recordó la convivencia luego de los atentados a la Embajada de Israel (1992, 29 muertos), y Amia (1994, 85 muertos) los que murieron judíos y no judíos.
«Hay un montón de desinformación que genera antisemitismo, por eso de hecho es mi misión intentar clarificar ciertas situación», redondeó.
AA