El paro general del jueves, al cual adhirieron los gremios aeronáuticos tradicionales, dejará al menos 700 vuelos afectados, según estimaciones de fuentes del sector y obligará a las aerolíneas a reubicar a más de 90.000 pasajeros que tienen ticket para volar ese día.
Todos los gremios que negocian su paritaria con Aerolíneas Argentinas anticiparon que participarán del paro de la CGT desde que Diputados dio media sanción al proyecto de Ley Bases.
Esos gremios son la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA, encabezada por Pablo Biró), la Asociación del Personal Técnico Aeronáutico (APTA, cuyo secretario general es Ricardo Cirielli), la Asociación de Aeronavegantes (AAA, encabezada por Juan Pablo Brey) y la Asociación del Personal Aeronáutico (APA), cuyo secretario general, Edgardo Llano, fue quien el lunes hizo un llamado a “escrachar” en los vuelos de Aerolíneas a los senadores que voten a favor de la Ley Bases. También participará de la medida de fuerza el gremio UPSA (personal superior), encabezado por Rubén Fernández.
No se plegaron los gremios “por empresa” de Flybondi y JetSmart, las dos únicas competidoras de Aerolíneas en los vuelos de cabotaje. Se trata de agrupaciones donde están encuadrados todos los empleados de cada empresa (fueron habilitados durante el gobierno de Mauricio Macri). Aun así, JetSmart tendrá el mismo impedimento que las aerolíneas internacionales, que es la adhesión al paro del personal de Intercargo, la empresa estatal encargada de prestar los servicios de rampas, donde 85% del personal está afilado al gremio APA que encabeza Llano.
En ese panorama, las líneas aéreas internacionales ya enviaron mensajes a sus pasajeros advirtiendo sobre posibles cancelaciones.
LATAM emitió un comunicado donde informó que “se podrían registrar demoras y/o cancelaciones en vuelos desde y hacia Argentina para el 9 de mayo” y que la compañía está entregando alternativas para que los pasajeros puedan cambiar su fecha de viaje sin costo. En Lufthansa, que tiene programado un vuelo este jueves hacia Frankfurt, ya decidieron cancelar la operación y reubicar a los pasajeros en vuelos posteriores.
Una situación similar abarca a varias de las líneas que tienen vuelos diarios hacia Ezeiza, como Air France/KLM, Delta y otras.
Las excepciones en ese contexto son sólo dos líneas aéreas, American Airlines y Flybondi. En los dos casos, estas empresas se “auto prestan” los servicios de rampas con personal propio o contratado y no utilizan los servicios de Intercargo.
Aun así tendrán una limitación extra, que en este caso son los controladores aéreos: si bien esta actividad está fuertemente regulada, los trabajadores de este sector pueden hacer paro de hasta tres horas por turno, entre las 8 y las 11 de la mañana y entre las 19 y las 22. De modo que la actividad aeroportuaria quedaría de todas formas paralizada en esas dos franjas horarias.
En Flybondi confirmaron que van a concentrar todos los vuelos que llegan o salen de Buenos Aires en Ezeiza, que es la única aeroestación donde esta “low cost” de capitales locales y estadounidenses (la encabeza el fondo de inversión Cartesian) se “auto presta” el servicio de rampas.
“De todas maneras, habrá reprogramaciones y cancelaciones de algunos vuelos por el paro de los controladores aéreos que frenarán toda la actividad durante 2 ventanas de horarios y por el servicio de Intercargo que nos provee la rampa en algunos aeropuertos del país (como es el caso de Aeroparque”, señalaron voceros de Flybondi.