Durante años, Kate Middleton y Rose Hanbury fueron más que simples conocidas en los círculos de la aristocracia británica. Compartían intereses, causas benéficas y hasta eran vecinas en Norfolk, donde los duques de Cambridge y los marqueses de Cholmondeley solían coincidir en eventos familiares. Sin embargo, lo que alguna vez fue una estrecha relación se convirtió en una historia de enemistad marcada por el escándalo y la especulación.
Hoy, Kate evita a toda costa a Rose, y el motivo detrás de este distanciamiento no es ningún secreto: la supuesta infidelidad del príncipe William con la marquesa de Cholmondeley.
De la amistad a la traición: el inicio del escándalo
Todo comenzó en 2019, cuando la prensa británica filtró un rumor que sacudió a la Casa Real: William habría tenido un romance extramatrimonial con Rose Hanbury mientras Kate estaba embarazada de su tercer hijo, el príncipe Louis. La noticia se difundió rápidamente y aunque desde el Palacio de Kensington nunca hubo una confirmación ni desmentida oficial, el distanciamiento inmediato entre Kate y Rose fue suficiente para alimentar las sospechas.
Hasta ese momento, ambas eran vistas con frecuencia en eventos públicos, ya sea apoyando causas sociales o acompañando a sus esposos en compromisos de la alta sociedad. Sin embargo, tras la filtración, Kate cortó toda relación con Rose y se encargó de dejar en claro que no quería volver a verla.
A pesar del tiempo transcurrido, la historia sigue generando titulares. En 2023, la polémica volvió a tomar fuerza cuando medios británicos aseguraron que William había pasado el Día de San Valentín con Rose Hanbury. Aunque nuevamente no hubo confirmaciones oficiales, las especulaciones sobre la crisis matrimonial de los príncipes de Gales volvieron a encabezar los titulares.
Kate Middleton y su estrategia de control
Si bien la familia real británica es experta en manejar crisis mediáticas, Kate Middleton tomó una postura clara: evitar a Rose Hanbury a toda costa. Sin embargo, dado que ella sigue formando parte de la aristocracia y mantiene lazos con figuras cercanas a la monarquía, los encuentros entre ambas son, en ocasiones, inevitables.
Un ejemplo de esto fue la coronación de Carlos III en mayo de 2023, donde ambas coincidieron en la Abadía de Westminster. Aunque sus hijos formaban parte del cortejo real, Kate y Rose evitaron cualquier contacto visual, dejando en claro que la relación entre ellas está completamente rota, dejando entrever que las versiones que surgieron hace tiempo podrían ser más que rumores.
VO