Damián Reinfestuel, sindicado como uno de los tres autores del crimen de Ivana Garcilazo, fue detenido este martes en Bolivia, tras estar 1 año y medio prófugo. Cayó luego de un operativo de Interpol.
La noticia fue confirmada a Rosario3 por Marcos Cella, uno de los abogados de la familia Garcilazo. Según detalló el jurista, al momento de la detención por personal de Interpol, Reifenstuel reconció y asumió su identidad y ya estaba siendo trasladado a Sucre donde aguardará la extradición.
Pese al tiempo que llevaba prófugo, Reifenstuel no había cambiado demasiado su fisonomía, solo tenía menos pelo y un notable desmejoramiento físico producto de la clandestinidad.
Se espera que el trámite para traerlo a la Argentina y luego a Rosario no demande demasiados días. El propio Cella explicó que, al momento de que se lanzó la captura internacional por parte de Interpol, también se avanzó con la Justicia de Bolivia par que, en el caso de ser encontrado en ese país, la extradición sea rápida.
El brutal asesinato se había producido el 30 de septiembre de 2023, después de una derrota de Newell’s en el clásico ante Rosario Central. Aquella tardenoche, Reinfestuel y dos hinchas leprosos más fueron a las inmediaciones del Coloso Marcelo Bielsa a agredir a hinchas canallas que pasaran por el lugar.
Ivana, de 32 años, iba en moto con su pareja y recibió un piedrazo en la cabeza, que le puso fin a su vida. El hecho quedó filmado por las cámaras de seguridad, que dieron paso a una investigación que acabó con Ariel Cabrera y Juan Masson detenidos. Ellos dos y Reinfestuel fueron los tres agresores identificados como responsables del asesinato.
Desde un principio los investigadores tenían como principal hipótesis que Reifenstuel había cruzado hacia Bolivia por un paso fronterizo no habilitado y que se desplazaba con una mochila y una carpa, según afirmó el fiscal de la causa Gastón Ávila.
Ni bien cometió el homicidio, el profesor de química pasó parte de enfermo en los dos establecimientos educativos donde trabajaba y posteriormente renunció. Luego, cruzó a Bolivia.
Los investigadores habían puesto a disposición de la ciudadanía una recompensa de 10 millones de pesos para quien aportara datos certeros sobre el paradero del asesino.
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