Hace unos meses se dio a conocer que el programa de permisos de permanencia temporal, conocidos como parole, que ha beneficiado a migrantes cubanos, haitianos, nicaragüenses y venezolanos, había suspendido temporalmente las Autorizaciones Anticipadas de Viaje (ATA, por sus siglas en inglés) por hallazgos de posibles fraudes. El pasado jueves 29 de agosto, se reanudó el proceso con algunos cambios rigurosos.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés), informó a través de una alerta en el sitio del Servicio de Ciudadanía e Inmigración (Uscis, por sus siglas en inglés) que, como parte de una revisión interna, se implementaron salvaguardas actualizadas a los procesos, con la incorporación de una rigurosa investigación mejorada a la solicitud de la persona de apoyo, conocida como patrocinador.
Asimismo, se dio a conocer que los posibles beneficiarios, ciudadanos de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela, deben continuar en monitoreo de su cuenta myUSCIS para obtener información actualizada sobre las ATA.
Los solicitantes de un parole humanitario deben tener una persona de apoyo en Estados Unidos que acepte proporcionar apoyo financiero durante su permanencia temporal. El primer paso en el proceso es que el patrocinador presente un formulario I-134A a través de Uscis.
La agencia señala que no hay una tarifa para presentar el formulario y advierte que las personas de apoyo no pueden cobrarle a un beneficiario.
“El acceso al proceso es gratuito (…) Tenga cuidado con cualquier estafa o posible explotación por parte de cualquier persona que solicite dinero asociado con la participación en este proceso”, indica el Uscis.
El formulario se debe enviar por cada beneficiario, incluidos los menores de edad. Los patrocinadores pueden ser personas que presenten una solicitud de forma independiente, junto con otros, o en nombre de organizaciones, empresas u otras entidades, y deben cumplir con requisitos mínimos:
Cuáles son los cambios con la reanudación del parole humanitario
Según el DHS, se hará una pesquisa adicional para identificar perfiles fraudulentos de las personas de apoyo y habrá métodos de revisión reforzados para verificar la presentación de solicitudes en serie.
La agencia federal ahora exigirá la toma de las huellas dactilares de los patrocinadores. “Este es un ejemplo del compromiso continuo del DHS de revisar constantemente las tendencias de presentación de solicitudes para identificar y abordar los posibles riesgos para la integridad del proceso”, especifican en un comunicado del DHS, y señalan que cualquier persona que cometa fraude u otros abusos “será remitida a las autoridades competentes para su enjuiciamiento”.
Algunos ejemplos de estos tipos de ayuda para los beneficiarios que las personas de apoyo deben tener en mente al considerar su capacidad para cumplir con este compromiso incluyen:
LA NACION